SI MUERO...

Si muero, no quiero gente llorando
y si lloran que sea de felicidad
no quiero cirios humeando
mejor un poco de comicidad


Si muero, no quiero ataúd de roble
que mi caja sea del rosal
que venga mi amor más noble
y me rocié con cal


Si muero queridos compañeros,
no quiero hipocrecía en mi funeral
quiero que todos sean risueños
y que recuerden mi cara jovial


Si muero, si muero, sólo si muero
permitiré que me vengan a llorar
que su venir sea sincero
y que mi descanso no vayan a profanar

FACCIÓN

Tengo un ejército de brujas trabajando las marañas de mi mente, que sulfuran mis visiones y las fabrican de mi nepente.

Tengo un ejército de gnomos taladrando las sienes de mi cabeza, que resanan las heridas y  desempolvan mi tristeza.

Tengo millones de ausencias, y tengo brujas, gnomos, ogros y sirenas, cada una habita en mi cabeza, cada una representa mi demencia...

RECETA DEPRESIÓN

Alcohol y depresión
que bella combinación
el cigarro calefacción 
y de ironía una ración


Dos manojos de ira
una pizca de razón
dos gotas de mentira
 y de dolor una porción


Un kilo de desilusión
de lágrimas solo un litro
un amargo corazón
y de amnesia otro litro


Todo el rencor en rodajas
dos tajadas de coraje
valor cortado a rajas
y otro poco de coraje


Mezcla todo a cansancio
no pares de mover la mano
arráncate el corazón despacio
avientalo lo más lejano


Bebe y come esto a diario
sírvetelo como un calvario
no olvides la receta a diario
ponlo en tu dieta y recetario


Acompáñalo con lágrimas
sírvelo con mucho olvido
endulzalo con venganzas
y de postre dolor a fluido


Más alcohol y depresión 
un poco de confusión
sírvelo con mucha desilusión
comelo solo rodeado de depresión

NO TIENE QUE VER....

Ser pobre no tiene nada que ver 
con ser sucio
aquella mañana rumbo
al trabajo, la vieja emitía
un olor fétido,
su hija denotaba rasgos de
vómito en su ropa,
y en el primer frenon del 
autobús ambas cayeron al suelo,
hubo un silencio,
todo se paralizó,
el sonido de un mosca interrumpió
el cuadro y se
posó en  el ojo cristalino de
la mujer;
un anciano reaccionó rápidamente
y pasó un pasaje
"se cobra dos- dijo- estas
van hasta el infierno"...
luego se abrieron las puertas
y alguien las arrojó a la calle
"pobres viejas- suspiramos- ya estaban muertas..."

...ESTREMECIMIENTO...

La piel de mi ombligo se erizó y mi abdomen se contrajo repentinamente; de mis labios carmesí salió una nube de vaho, mis pupilas se dilataron y mi respiración se agitó, sentí su lengua recorrer mis piernas y lo suave su respiración erizó cada vello de mi cuerpo; sentí su calor cerca del mío, su piel que se pegaba a la mía por aquél sudor que fluía de nosotros, puso su oído sobre mi seno izquierdo para escuchar el palpitar de mi corazón; pronuncié un par de palabras entre dientes antes de que mi mirada se tornara en blanco y sintiera ese estremecimiento por todo mi cuerpo que solo él producía en mí. Los dos nos fundimos en un mismo ser y la danza de nuestras caderas se convirtió en la coreografía perfecta, vi su rostro con los ojos cerrados y esa leve sonrisa que se dibujaba en sus labios y que solo desapareció para expulsar un gemido grave y melodioso, entre cortado y lujurioso.

...Después vino un estremecimiento de su cuerpo mientras echaba su cabeza hacia atrás mirando al cielo; arañé su espalda ligeramente y él dejó caer su cuerpo sobre el mío para seguir escuchando el golpeteo de mi corazón ahora más agitado.

Tomé su cabello entre mis manos, besé su cabeza y dije: "te amo"; él respondió, con los ojos cerrados:"te amo", sonreí y cerré los ojos, ambos suspiramos para caer en profundo sueño.

EL JARDIN DE LAS TINIEBLAS

Necesitaba escupir la palabra mas obscena que en mi lengua blasfema habita, trasnochar en el jardín de las tinieblas, dejarme llevar por la psicosis que muerde mis pulgares y ríe mientras grito de dolor, la náusea se apodera de mí y me transporta a una noche de luna llena, a pensar en la letra de mi último réquiem... los árboles son tétricos y en la oscuridad comienzan a aullar ruidos que alimentan mi mente, que me hacen sudar, que me insitan a llorar, a temblar y correr a tientas trasnochando por los pensamientos, alumbrada por la luna, guiada por mi agudo olfato y mi instinto de sobrevivencia; violines, violines que acompañan mi loca cabeza, música tocando más rápido, gritos, gemidos, estoy en un jardín, un jardín que no tiene flores.... más que hierba seca, lobos, lechuzas, animales extraños y una loca... yo... corriendo sin rumbo, paniqueada, asustada, extasiada, moribunda, intentando escapar de sus peores temores, del terror psicológico que en su mente habita, del psicópata que forma su lado bipolar, que se ríe de sí misma... ¡no, ya nos correré más!... creo que es hora de reír, de seguir corriendo pero ahora feliz en este jardín de las tinieblas, donde todo es una sinfonía que retumba en mis sienes, donde mi peor enemigo soy yo, donde juego a cazarme a mi misma, donde nadie tiene acceso a este jardín, donde la noche se ha vuelto eterna...

Todo pasa rápido, mi cabello vuela al viento y mis movimientos forman una batuta que dirige la música, y allá a lo lejos en el inmenso cielo estrellado, logro visualizar mi última ilusión y comienzo a girar cara al cielo, sin perder la luna de vista... ¿dime qué más puedo pedir si es mi jardín?,¿dime qué me falta si todo lo perdí?, nada más pasará, el momento es eterno para mí, aunque a ratos el psicópata que vive en mí amenaza con regresar, y de nueva cuenta tengo que correr, es el karma de mi promiscuidad que sigo pagando... es el karma de una loca que sigue penando...

EL FRASCO, EL OGRO Y YO

Dejé que el vaho de su aliento tocara suavemente la magia de mis alas.

Creí verme en un frasco dentro de su colección...

-¡Ey ogro!- tomé aire para hablar- necesito aire, necesito volar, necesito respirar, revolotear y cantar, el polvo de mis alas se agota, la luz de mi mirada se apaga, desfallezco.. ¡quiero mi libertad!

El ogro me miró... tomó el frasco... lo destapó... me tomó entre sus toscas manos... emuló una sonrisa tierna, dulce... y de su ojo rodó una lágrima por su mejilla... susurró algo para mi oído...

...¡ y me aplastó!

CUESTIÓN DE CRAYOLAS

Y tomó un crayón

y coloreó la luna de amarillo,

lucía tan hermosa

que por un momento pensé

que sus iluminados habían

salido de los bordes.

Y tomó un crayón

y coloreó el cielo de rosa

parecía tan hermoso

que le creí,

que creí en el amor

y pensé que mi corazón estallaría.

Pero tomó otro crayón

y coloreó mi vida de negro

estaba tan vacía que comencé a dejar de creer;

y mi alma no encontró luz...

Así que ¡robé sus crayones

y los tiré a la basura!,

nunca, nunca más volvió a tomar un crayón

para lastimar mi mundo

¡nunca más!

¡porque corté sus manos!...

y ahora, con el rojo de su sangre

tiño mi mundo...

¿y sabes por qué?...

...¡pues porque me gusta el color rojo!

EPITÁFIO

Siempre me han tachado de ser una loca enamorada de la vida, ¿y sabes qué?... es verdad.

Cuando Dios me creó, olvidó poner los sentimientos dentro de mi cuerpo y ahora viven como tatuajes adheridos a mi piel..., y tengo ganas de amar ¡muero por poder amar! pero mi cuerpo amorfo y poco carnal se ha convertido en un ente que lacera a quemarropa cuando intenta besar; las noches me carcomen y no hallo qué hacer, hato mis puños a mi cama para no apuñalar mi vientre en el que se engendra un sentimiento que ni yo sé cuál es... estoy muriendo, y muero por caer entre tus manos para que alivies esta agonía que pesa como las lápidas de mis antiguos amores...

Ahora guardemos un minuto de silencio por lo que pude haber sido, un minuto de silencio y escribamos en mi epitafio "aquí yace una loca enamorada de la vida..."

CERRARÉ LOS OJOS

Cuando logré abrir los ojos caí en la cuenta de que mi cabeza se había desprendido de mi cuerpo, logré ver a distancia la tapa de mi cráneo y pronto oí revolotear una mosca que altanera engullía parte de mi cerebro.

Vislumbre un trozo de mi lengua entre el hocico de dos perros que forcejeaban para obtenerla, mis labios se desmoronaron y poco a poco casi de manera cardiaca una lágrima brotó de mi cristalino ojo para recorrer aginozantemente mis mejillas; caí en un trance intentando descubrí dónde me hallaba, tratando de escuchar a través de mis agusanados oídos...

Recordé la infelicidad del hombre y la amargura de sus ojos, intenté imaginar la llave para abrir su corazón, me esforcé por recordar dónde había extraviado mi cuerpo, para morir en paz con él..., pero mis fuerzas estaban agotadas y mi corazón marchito... cerré mis ojos y mientras tarareaba una alegre canción me desvanecí en un viaje sin retorno, por un abismo envolvente, en el que reina la psicodelia y la incoherencia, donde los minutos transcurren a destiempo e imagino una vida feliz...sin rencores... sin lágrimas... sin malos recuerdos... una vida que quizá en el mundo terrenal jamás tendré...

Algún día, algún día volveré a abrir los ojos, y entonces empezaré el viaje para encontrar dónde quedó mi cuerpo, le daré "cristiana sepultura" y entonces sí... cerraré los ojos para siempre...