Qué irónica y patética es la vida, ¿irónica?, ¿por qué siempre lo escribo?..., ¡Tonta!, sí tonta gata denigrada a rata!, quizá es el karma que me eleva al eco adyacente del sulfuro de su olor...¡caray!, suele ser tan temible el color vibrante de su voz, la mirada penetrante de eco en una nube de arroz, quise pensar y meditar sobre la letra de tu voz..., ¡ya morí!, ¡levántame anda!, ¡extraeme con tu espátula! ¡despacio!, ¡con cuidado que sola me desparramo!, soy el crio negado de tu poca imaginación, soy la ceniza temible que aguarda bajo tu sonrisa... (shhh!!)... poco a poco , la luz se apaga... (shhh!!)... poco a poco, mi voz baja...
Hago un silencio y peco a estupor, pienso, lo imagino , me sonrojo de carmín soy...¡ups!, ¡qué mal estoy!, de pronto abordo una tenue luz, cierro mis ojos, es esa dulce melodía que me acompaña, es una tonada sensata, ¡caray recuerdo mi ayer!, lloro sí lo hago ¡y qué!, es una lágrima de cristal que rueda por mi mejilla, sacudo mi cabeza al hacer una mueca, río de tristeza temible fiera, ronroneo y de pronto de alas me visto, emerjo bajo el chasquido de una guitarra de rock, miro mi pasado de pronto pasar. Veo, miro y observo aún sin comprender, ¡qué vacía es la habitación llena de gente!, ¡qué bofa, que incoherente es la multitud que me rodea en la soledad!, ¡qué triste es mi reflejo bajo el sol!, ¡qué inestable es el sol que recuerda quién soy!...
Sonrío, sí eso hago finjiéndo parecer un arlequín que se escabulle en una fiesta de antifaces...
Suspiro, sí aquí lo hago de nuevo, ¿habrá alguien que me comprenda?, lo hago de nuevo justo llegando al umbral de la razón, explotó mi cuerpo y caigo al precipicio, me transformo dejo mis alas que se desintegran a gran velocidad, mírame que una partícula soy, soy aún mas pequeña que el polvo, tan pequeña que olvido la dimensión del mundo exterior, son las masas que me mueven, es el eco de una voz que me impulsa a donde en verdad no quiero, vuelo, vuelo y llego ahí sin saber por qué, de nuevo quiero llorar y esta vez mis lágrimas son muchisimo mas grandes que mi cuerpo, ¡auxilio!, ¡ayuda!, ¡me ahogo en una lágrima!, ¡pero claro que me ahogo en ella!...
Estoy cansada, cansada de tanto luchar, cansada de volar y también de tratar de intentar, mi cuerpo cae al suelo y se deposita en el pavimento, no tengo ganas ni de parpadear, ya ni mi sangre quiere circular..., he olvidado hasta respirar...
Entro en trance y comienzo a palpitar, me aburro de aquí estar, muevo una falange y empiezo a respirar, me visti con mi "traje de farsa" y me integro a la realidad..., harta de tanto pensar, giro mi cabeza y le sonrío a un niño, lo envidio, envidio su infancia e inocencia... ¡qué ironía yo que quería crecer!...¡qué irónica y patética es la vida!, ¿irónica?, ¿por qué siempre lo escribo?
Hago un silencio y peco a estupor, pienso, lo imagino , me sonrojo de carmín soy...¡ups!, ¡qué mal estoy!, de pronto abordo una tenue luz, cierro mis ojos, es esa dulce melodía que me acompaña, es una tonada sensata, ¡caray recuerdo mi ayer!, lloro sí lo hago ¡y qué!, es una lágrima de cristal que rueda por mi mejilla, sacudo mi cabeza al hacer una mueca, río de tristeza temible fiera, ronroneo y de pronto de alas me visto, emerjo bajo el chasquido de una guitarra de rock, miro mi pasado de pronto pasar. Veo, miro y observo aún sin comprender, ¡qué vacía es la habitación llena de gente!, ¡qué bofa, que incoherente es la multitud que me rodea en la soledad!, ¡qué triste es mi reflejo bajo el sol!, ¡qué inestable es el sol que recuerda quién soy!...
Sonrío, sí eso hago finjiéndo parecer un arlequín que se escabulle en una fiesta de antifaces...
Suspiro, sí aquí lo hago de nuevo, ¿habrá alguien que me comprenda?, lo hago de nuevo justo llegando al umbral de la razón, explotó mi cuerpo y caigo al precipicio, me transformo dejo mis alas que se desintegran a gran velocidad, mírame que una partícula soy, soy aún mas pequeña que el polvo, tan pequeña que olvido la dimensión del mundo exterior, son las masas que me mueven, es el eco de una voz que me impulsa a donde en verdad no quiero, vuelo, vuelo y llego ahí sin saber por qué, de nuevo quiero llorar y esta vez mis lágrimas son muchisimo mas grandes que mi cuerpo, ¡auxilio!, ¡ayuda!, ¡me ahogo en una lágrima!, ¡pero claro que me ahogo en ella!...
Estoy cansada, cansada de tanto luchar, cansada de volar y también de tratar de intentar, mi cuerpo cae al suelo y se deposita en el pavimento, no tengo ganas ni de parpadear, ya ni mi sangre quiere circular..., he olvidado hasta respirar...
Entro en trance y comienzo a palpitar, me aburro de aquí estar, muevo una falange y empiezo a respirar, me visti con mi "traje de farsa" y me integro a la realidad..., harta de tanto pensar, giro mi cabeza y le sonrío a un niño, lo envidio, envidio su infancia e inocencia... ¡qué ironía yo que quería crecer!...¡qué irónica y patética es la vida!, ¿irónica?, ¿por qué siempre lo escribo?
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